Los perros y los humanos tenemos conceptos de paseo que no siempre son idénticos…
Saliendo por el portal esta mañana con Dixie estuve pensando en:
– que tenemos que llegar al garaje, hay mucho tráfico y hemos quedado…
– después, cuando lleguemos a casa, tengo que imprimir unas cuantas cosas, revisar otras…
– luego por la tarde, cita con la veterinaria para la vacuna…
Mi cabeza no estaba en el presente, sino en muchos momentos del día, antes, y después de lo que realmente pasaba en ese momento. Me sentí accelerada.
El día a día de la mayoría de nosotros, ¿no?
Cuántas veces observo cómo los vecinos de mi barrio pasean a (“a”, no “con”) sus perros
cómo si fuera una carrera al parque. Salimos de casa pensando en el destino, no en el camino.
Y si el perrete se para, olisqueando ese bocadillo riquísimo en la papelera de la esquina, tiramos de el.
“Veeenga, vaaamos, deja eso ya!” – lo escucho a menudo.
Dixie salió esta mañana del portal pensando en el mundo de olores que se le abrió, al salir a la calle. Se detuvo un momento, olisqueando el aire. Su cara estaba relajada y contenta.
Yo sabía que no debería transmitirle la prisa que yo sentía.
Al final, la animé con voz alegre a seguirme al garaje, y me siguió, contenta.
Pasamos una mañana agradable en la finca de un amigo, al sol, él y yo hablando de proyectos, Dixie investigando el terreno.
Cuando se acercó el tiempo para irnos, me pillé de nuevo pensando ya en el camino a casa, la autopista. Las cosas pendientes en casa.
Pero de pronto vi a Dixie completamente ensimismada, en medio de una colonia de madrigueras de ratones.
Me detuve, respiré. En silencio.
Esperé el tiempo que ella necesitaba para investigar, observar, escuchar los ruiditos que hacían los ratones bajo tierra.
Y luego nos fuimos a casa, las dos ya mucho más relajadas.
Deberíamos todos detenernos cuando se detienen nuestros perros, y observarlos. Aprender de ellos a disfrutar el momento. Sonreír cuando se encuentran un tesoro especial en forma de un trocito de pan. Buscar la sencillez en dejarles ser perros sin intervenir.
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